ETIQUETADO 14.11.06

Y aquí estoy esta noche, leo a Baudrillard y me reprocho por hacer referencia a un autor, muchas veces ha pasado que leyendo algún libro citan alguna obra o autor sin explicar más el por qué de la referencia, tomo nota mental, pretendo leerlo mas adelante para luego olvidarlo, ya sea por tiempo, por falta de interés o por considerar que mi poco presupuesto no alcanza para lujos. Para aminorar el error explicaré la referencia: Jean Baudrillard "El otro por sí mismo".
Debo admitir que es intencional caer en este error de mencionar obras o autores desconocidos para algunos, después de varios capitulos leidos y releidos me causa la impresión de que, o soy bastante tonta para entender ese tipo de filosofia o quizá mi mundo no es así y no puedo comprender su punto de vista. Leo por tercera vez el capitulo referente a la seducción y me pregunto ¿Es necesario complicarse tanto? Vivimos plagados de conflictos existenciales, es la consciencia colectiva del conflicto, de la paranoia por ver o explicar cosas que posiblemente no sean más de lo que muestran. Seducción es sólo éso, una palabra de nueve letras que existe en nuestras mentes y que aplicamos como concepto a uno de nuestros conflictos existenciales.
Seducción: efecto pasivo que realiza un pastel de chocolate en un dia invernal sobre personas como yo. ¿Por qué pasar doce páginas (como Baudrillard) explicando lo que es o lo que no es la seducción, Obligandote a creer que existe algo más allá, que tu definición no es lo que es, que es mas complejo, que implica y entrelaza a toda una filosofía?

Hormigas, sólo eso, metidos en una rutina, imaginando mundos, complicando la realidad, creando realidades. Ser idealista y creer en magia y en amor, para después encontrarte parado en la nada alumbrado por un reflector de consciencia que te muestra que sólo eres tú. Todo lo demás estaba en tu complicada mente.
Ser sólo un elemento más del aparato social, cumpliendo funciones específicas. Etiquetado desde que naces, re-etiquetado cuando debes cumplir nuevas funciones, sustituir a quienes fueron antes; tiempo atrás, segundos, minutos, días, años, alguien tenía tus funciones.
Hoy mi etiqueta dice: Lourdes-25 años- hija- hermana- idealista- optimista- parásito.
Ahora por curso natural seré re-etiquetada. Espero en esta nada sin decidirme a caminar con una nueva etiqueta, con el tiempo fluyendo mientras la inercia causa estragos en mí, cayendo en el vicio de la inercia sin motivos para salir o cambiar de posición.
Qué decepción sería que todo fuera lo que se ve. Por eso hay que inventar mundos, historias, deseos, ambiciones, futuro. La vida es como es, debes cumplir con tu etiqueta en este aparato social. La etiqueta te es dada , estás obligado a cargar con ella.
¿Cómo sería si el aparato social te preguntara qué etiqueta deseas? Comienzas a imaginar y luego ves tu realidad- no puedes es inconcebible. El aparato se burla de ti, sólo usó tus conflictos para reirse, para restregartelo en la cara. Estás inmerso en él, no pudiste vencerlo pero nunca fue opción. No existe más, tienes tu función y no hay otro lugar para tí.
Te vas soñando llenandote de nuevos conflictos. Estás en el aparato y sólo te queda soñar y desear.
¿Qué deseas?
Yo... deseo magia
¿Será que el deseo bloquea a la máquina? ¿O será que la máquina se vuelve a burlar de ti para darte más conflictos y mantenerte creyendo?
¿Por qué a veces deseas tanto y esto se hace realidad? Habías perdido la esperanza, habías dejado de desear y de repente puede pasar junto a ti y no notarlo, puedes verlo y temer de él, puedes tomarlo o no, o puede tumbarte y no sabrás como reaccionar. Te desconcierta, estiras tu brazo y puedes alcanzarlo. Ahí está tu deseo flotando suavemente frente a ti. ¿Es real o una burla mas? No sabes qué pensar, no sabes qué creer, dejaste de creer en magia y deseos mucho tiempo atrás. Sólo queda una opción: intención del destino.
Quizá lo tomes sabiendo que es lo que debía ser y así nunca será mágico. Si creyeras te llenaría de su mágico esplendor, pero no, sólo es lo que debía ser, pierde su brillo, deja de flotar y lo metes como una canica más en tu bolsillo, conservando en su cadaver la minima belleza de lo que pudo ser.
Pensamientos, conflictos, deseos, nunca acabarán. Mi mente regresa aquí, miro a mi alrededor y sigo parada en la oscuridad, en ésta nada bajo este reflector.
-¿Qué etiqueta deseas?
Abro los ojos, levanto la cara, seriedad, después una sonrisa sarcástica
-Lourdes-25 años- creyente en magia, libertad de decisión, deseos y amor.
¡Qué más da! Tarde o temprano regresaré. Ingreso al selecto grupo de los que pusieron en duda el destino o la decisión. Creo y deseo.
Salgo de ahí, las luces se encienden, estoy dentro de la máquina, maldita libertad, sigo en la nada pero ahora estoy en el escenario social, debo decidir pero primero debo desear. ¿Qué deseo? Me abruma quizá sea bueno tomar un paso a la vez.